Ha llegado a Netflix la serie sobre un caso de la vida real, que durante décadas, mantuvo a un país entero viviendo con miedo. Un responsable sin rostro, una investigación llena de terribles errores y un expediente que se convirtió en uno de los más polémicos de toda Europa.
Lo que empezó como una historia común consecuencia de un problema específico en una pareja, se transformó en un rompecabezas que aún hoy sigue generando fuertes dudas.

La serie profundiza en una cadena de hechos terribles ocurridos entre los años 70 y 80, todos con un patrón inquietante y un responsable al que los medios le dieron un apodo tan perturbador que terminó convirtiéndose en parte de la cultura popular. Más allá del impacto emocional, la producción revela cómo una investigación mal manejada puede desviar por completo el rumbo de la verdad.
La persona que cometía los hechos seguía víctimas con un patrón específico, básicamente eran parejas jóvenes que buscaran lugares solitarios para estar juntos, fue demostrado que no había ninguna relación entre este personaje y las víctimas.
A pesar del paso del tiempo, las características y espacio donde se encontraban las víctimas continuaron siendo las mismas, lo que llevó a la policía a sospechar que se trataba del mismo responsable, en conclusión buscaba parejas que se encontraran aisladas.

Los medios informativos le dieron un apodo escalofriante al responsable, un nombre que se volvió parte de la cultura popular en Italia en la época. Pero detrás de ese apodo había algo mucho más complejo: fallas, teorías contradictorias y decisiones que cambiaron por completo la dirección del caso.
La producción de Netflix muestra cómo la presión social y mediática terminó afectando fuertemente la investigación por las diferentes versiones que se ofrecieron, dando paso a sospechosos, hipótesis y giros inesperados.
Después de años de incertidumbre, las autoridades terminaron enfocándose en un hombre llamado Pietro Pacciani, cuyo nombre quedó para siempre vinculado al caso. Fue primordialmente acusado, luego absuelto, y su proceso nunca tuvo un cierre definitivo.

La serie se llama en Netflix, El monstruo de Florencia, si eres amante de los thrillers y documentales de casos reales no te la puedes perder.