En el año 1976, la televisión cambió para siempre con la llegada de la famosa serie Los Angeles de Charlie. El programa no solo entretenía: rompió esquemas mostrando que las mujeres podían ser inteligentes, fuertes y elegantes a la vez.
Farrah Fawcett, Kate Jackson y Jaclyn Smith se convirtieron en unos verdaderos íconos del empoderamiento femenino, inspirando a toda una generación de jóvenes. A pesar de las críticas que lo calificaban como “televisión de atractivo físico”, Charlie’s Angels fue un éxito rotundo y se mantuvo en el top 10 de audiencia.
Detrás de cámaras hubo anécdotas curiosas: el actor original que iba a dar voz a “Charlie” fue despedido por problemas con las bebidas, y su reemplazo, John Forsythe, grabó sus primeras líneas ¡en pijamas!

Cada “Ángel” tenía su propio auto Ford, aunque las escenas mostraban los mismos vehículos una y otra vez, incluso estacionados en zonas prohibidas. En cuanto a salarios, Farrah y Jaclyn ganaban 5,000 $ por episodio, mientras que Kate recibía 10,000 $. Con el éxito, Jaclyn Smith llegó a cobrar 75,000 $ por capítulo, una cifra enorme para la época.

Originalmente la serie iba a llamarse “Los Gatos de Alley”, pero gracias a una sugerencia de Kate Jackson cambió al icónico Los Angeles de Charlie.
Farrah Fawcett, sin dudas fue la más popular, pero dejó la serie tras una temporada. Quería papeles más profundos y artísticos, no solo ganar fama. Su salida generó conflictos legales y una demanda, pero finalmente regresó para seis apariciones especiales.

Cheryl Ladd tomó su lugar con simpatía y humor, usando una camiseta que decía “Farrah Fawcett Minor” en su primer día. Aunque con los años la serie perdió fuerza, su legado sigue vivo: inspiró películas con Cameron Diaz, Drew Barrymore y Lucy Liu, y se hizo un reboot en 2019 con Kristen Stewart.
Charlie’s Angels demostró que la feminidad y la fortaleza no se excluyen. Las Ángeles no solo resolvían casos: abrieron camino para una nueva generación de heroínas en la pantalla grande.